Hola a tod@s,
Tradicionalmente en época de cuaresma siempre se consumían muchas legumbres, casi como una penitencia. Quizás por este motivo, en el imaginario de mucha gente las legumbres sean un producto de segunda clase que no puede rivalizar ni en sabor ni en calidad a un buen trozo de carne. Nada más lejos de la realidad!
Lo cierto que el mundo de la legumbre es muy interesante y versátil. Si os animáis a descubrir sus múltiples variedades disfrutaréis de una gama de sabores y texturas increíbles que animarán vuestros paladares y mimarán vuestra microbiota.
Hoy os presento una variedad de alubia blanca llamada fesol de Santa Pau. Se trata de unas alubias blancas y pequeñas que se cultivan en la comarca catalana de la Garrotxa. Su calidad y sabor es tan excepcional que en el 2015 consiguió que la UE le otorgara la Denominación de Origen Protegida (DOP) que solo consiguen aquellos productos alimentarios tradicionales de la mejor calidad relacionados con un lugar de cultivo o producción de origen preciso.
Este es su logo:
Personalmente soy una gran defensora de este tipo de proteína vegetal, porque son una fuente nutricional de lo más saludable, son económicas, son un producto esencial de la dieta mediterránea y porque son una alternativa sostenible al consumo masificado de carne roja. Además son deliciosas!
La receta de hoy es muy sencilla, porque se trata de una ensalada, así que ya no han excusas! Obviamente, si no encontráis este tipo de alubias podéis preparar esta receta con cualquier otra variedad que tengáis a mano.
Ingredientes:
- 400g de alubias de Santa Pau
- 1 hoja de laurel
- AOVE
- 1 pepino
- 2 ramas de apio
- 4 rabanitos rosas
- 1/2 hinojo
- 1 cucharada de pipas de calabaza
- 1 cucharada de pipas de girasol
- 1 cucharada de alcaparras
- zumo de limón
- sal y pimienta
Indicaciones:
- Dejar las alubias en remojo la noche anterior o al menos durante 8 horas.
- Cambiar el agua y poner a cocer con una hoja de laurel entre una hora y hora y media. La duración dependerá de la dureza del agua que puede variar de una región a otra.
- Añadir la sal al final cuando ya estén casi cocidas. Este paso evitará que esta legumbre se despelleje.
- Cuando estén cocidas pasarlas bajo el grifo para enfriarlas. Este paso evitará que queden firmes y no se deshagan.
- Mientras se enfrían las legumbres se prepara la ensalada.
- Cortar el pepino, el eneldo, el apio y los rabanitos en trocitos pequeños. Esto facilitará mezclarlos con las alubias y que el aliño se mezcle mejor.
- Para el aliño utilizaremos 4 cucharadas de AOVE, zumo de limón, una pizca de sal y pimienta
- Mezclar todo bien y en el último momento añadir las alcaparras y las pipas que habremos pasado por una sartén previamente para darles un toque de calor.
El resultado es un plato nutritivo y refrescante ideal para cualquier día de primavera o verano. La mantecosidad de las alubias se fundirá en vuestro paladar pero con notas crujientes gracias a las pipas y a las hortalizas sin olvidar el toque ligeramente ácido de las alcaparras y el limón. Una verdadera delicia!
A nivel nutricional este plato es ideal para personas que tengan resistencia a la insulina (prediabetes), estreñimiento, colesterol o quieran mejorar su función hepática durante los meses de primavera.
Si deseáis saber más sobre qué otro tipo de legumbres cuentan con la denominación de origen protegidas o de indicación geográfica protegida podéis consultar el sitio del ministerio de alimentación https://www.mapa.gob.es/es/cartografia-y-sig/publicaciones/alimentacion/mapa_igp_legumbres.aspx
Os interesa otro plato de legumbres, probad las alubias del Ganxet con mis Alubias a la marinera
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