En mi último post sobre el Amaranto, que por cierto ha suscitado bastante interés, os comentaba que no siempre es fácil cocinar este cereal a causa del tamaño de sus granitos. Por ese motivo hoy he decidido hacer una receta con este ingrediente para que veais que nada es imposible. Recordad que se trata de una alternativa muy interesante para que las personas sensibles al gluten o celíacas varíen un poco su dieta. YES WE WORTH IT!!!
Hoy hoy propongo un plato que si se cocina en plan rancho, es decir en grandes cantidades, podéis dar de comer a toda una tropa por muy poco esfuerzo y dinero.
Para realizar esta receta me he inspirado de una receta egipcia llama «koshari». Los que conozcan un poco la gastronomía egipcia sabrán que se trata, seguramente, del plato más popular de Egipto porque tiene la particularidad de quitar el hambre durante todo el día. ¿El secreto? Mezclar dos fuentes de carbohidratos (pasta y arroz), con dos de proteína vegetal (garbanzos y lentejas) con mucha salsa de tomate y cebolla frita. Todo esto aliñado con una salsa a base de ajo, aceite y limón. No voy a mentiros, su sabor es tan expectacular como su valor nutricional. No os lo vais a creer pero incluso hevisto bocadillos de Koshari!!! Si no te mures intentando digerirlo fijo que repites!!
Pero como nosotros no tomamos pasta y somos de estómago delicadito hoy os propongo una receta con un sabor muy similar pero mucho más ligera y equilibrada. La combinación del amaranto con las lentejas es ideal tanto por su sabor como para aumentar el valor biológico de las proteínas.
Ahí va la receta, espero que os guste:
Ingredientes
1 taza de amaranto
2 tazas de lentejas beluga
1 taza de salsa de tomate casera (si es posible)
1 cebolla grande (para freir) + 1 mediana para cocer las lentejas
1 ramito de cilantro
2 limas
2 cucharadas de aceite de oliva extra-virgen
4 gajos de ajo
sal, pimienta
paprika
1 hoja de laurel
1 clavo
pizca de comino
Indicaciones
- Si tenéis tiempo o sois del tipo precabido dejar en remojo el amaranto durante dos horitas para dejar activar las enzimas. Sino, limpiar bien el grano bajo el grifo de agua fría frotando con los dedos para eliminar el saborcillo amargo.
- Para su ebullición preveer dos tazas de agua por una de amaranto seco. Hervir de 7 a 10 minutos con un poco de sal.
- Tras su ebullición colar usando un colador fino o un paño de gasa porque sino os perderéis los granillos por la fregadera …
- Dejar reposar.
- Podéis comprar las lentejas en remojo porque ahorra mucho tiempo, si es posible evitar las de conserva. Si sois de los tradicionales como yo ya sabéis cómo se cuecen, en agua fría, con una cebollita a la que le encrustaremos un clavo, una hojita de laurel, algo de sal, 20-25 minutos en ebullición y listo.
- Colar bien. Es importante que las lentejas queden firmes y bien escurridas.
- Bien, ya tenemos el amaranto y las lentejas bien escurridas.
- Si sois de los superorganizados quizás tengáis ya la salta de tomate lista, sino es el momento de prepararla. Nunca me cansaré de repetir la diferencia entre una buena salsa de tomate casera y una de bote, pero si estáis muy achuchaos de tiempo, sea!
- En una sartén echar un chorrito de aceite, lo justo para sofreír la cebolla picadita en juliana. El aceite debe estar caliente, sin quemarse, para dorar la cebolla y dos ajos picaditos. Ver foto.
- Ahora empieza a oler divino de la muerte, verdad?
- Retirar la cebolla y el ajo sobre un poco de papel absorbente.
- Preparar el aliño: 1 cucharada de aceite de oliva extra-virgen, el zumo de dos limas o 1/2 limón, una pizca de comino y de paprika
- Merclar todos los ingredientes (el amaranto, la salsa de tomate y las lentejas) en una sarten y mezclar con la cebolla frita y los ajos.
- Añardir el cilantro limpio y picadito en crudo con el aliño.
- Remover todo y servir.
Os encantará!
Os aconsejo acompañarlo con una ensaladita de hojas verdes.
Buen provecho
Misbamia