Buenos días a tod@s!!
Muchas cosas han pasado desde mi último post!!
Por fin terminé mi máster en Nutrición y Salud y una mudanza más, esta vez a Barcelona!! Sí, he vuelto a casa tras 22 años de aventuras. Cómo podéis imaginar esto da para replantearse muchas cosas, nueva casa, nuevos muebles, nueva orientación profesional …
Como cada país cuenta con una diversidad alimentaria diferente, seguramente de ahora en adelante encontraréis recetas más iberico-mediterráneas. Últimamente he descubierto que me fascinan platos tradicionales que antes me hubieran dado arcadas como los callos, los cap i pota, las carrilleras …así que creo que mi inspiración para a tirar por estos derroteros hasta que me de por otra neura, ja ja.
Hoy os propongo una receta sencilla que he realizado en una cazuela de hierro, pero que se puede hacer sin duda en una normal. La ventaja de estas cazuelas es su cocción lenta, lo que le da a la carne un sabor inconfundible, y que convierten estos guisos en algo magistral.

Ingredientes (para tres personas)
- 500 g de costilla de cerdo
- 3 ramas de apio
- 1 cebolla blanca
- 2 dientes de ajo
- 1 puñado de almendras crudas
- 3 cucharadas de aceite de oliva extra-virgen
- 1 ramita de orégano en rama (o molido)
Preparación
Salpimentar las costillas la noche anterior añadiéndole el orégano para darle a la carne más sabor. En el caso de que tengáis prisa, también se puede hacer al momento, aunque quizás el sabor no quede tan penetrante
Calentar en cazuela las tres cucharadas de aceite. Cortar el costillar en dos si no os cabe y marcar. Mientras la carne se va dorando, cortamos en trozos pequeños el apio, la cebolla, y el ajo a fuego medio.
Cuando se haya haya dorado una cara, se dará la vuelta a la otro y se dejará el guiso cubierto con la tapa a fuego medio-bajo durante una hora aproximadamente. Recordad que el tiempo de
Durante este tiempo los jugos se irán mezclando y se irán reduciendo muy lentamente convirtiendo las verduritas en una especie de salsa que ligaremos con un puñado de almendras molidas. Como yo no tenía almendra molida la he triturado en el procesador y me ha quedado igual de bien.
Dejar que la almendra se ligue suavemente con el resto de la salsa y retirar el guiso del fuego.
El resultado es un guiso suave y meloso que se deshace el la boca. Ideal para los días fríos de invierno. Aconsejo tomarlo con una gran ensalada a base de apio y nabo . Estas dos ingredientes harán que el plato os siente todavía mejor y os hará olvidar la necesidad de mojar con pan!! garantizado!!
Aquí os dejo una receta fácil y tradicional hecha con mucho amor.
NOTA: Recordad que el consumo de carnes rojas debe hacerse con moderación y siempre junto a una gran cantidad de verdura. ¿Qué significa con «moderación»? Lo ideal es que la porción se equivalente a la palma de tu mano. Tomar consciencia de lo que se come es un primer paso para una alimentación saludable.
Pues felicitaciones por tu Master y también por el regreso. Recibo tus actualizaciones desde Argentina y me encantan. Aún cuando no hayas podido publicar tan seguido, siempre son muy interesantes. Gracias.
Buenos días Irene! Me alegra que te gusten mis posts. ¿Argentina? Qué gozada!!! .Mil gracias por tu comentario.